Pruebas,  TEA

Pruebas estandarizadas no recomendadas para la Evaluación del Autismo

Existen algunas pruebas estandarizadas que generalmente no se recomiendan para personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA), especialmente si no se ajustan o adaptan al perfil sensorial, comunicativo y social del individuo. Aquí algunos ejemplos y el porqué:

  1. Pruebas verbales de inteligencia o razonamiento (como el WAIS o WISC, en sus subtests altamente verbales): Debido a las dificultades en la comunicación y el lenguaje, estos tests pueden no reflejar con precisión las capacidades cognitivas de una persona con TEA.
  2. Evaluaciones proyectivas no estructuradas (como el Test de Rorschach): Estas pruebas requieren interpretación de figuras ambiguas, lo cual puede ser desafiante para personas con TEA que suelen tener un estilo de pensamiento más literal y concreto. Esto puede afectar la confiabilidad de los resultados, ya que pueden interpretar las imágenes de forma muy diferente.
  3. Pruebas de interacción social y de habilidades emocionales no estructuradas (como el Test de Apercepción Infantil [CAT] o el Test de Apercepción Temática [TAT]): La interpretación de estas pruebas depende de las habilidades sociales, emocionales y de teoría de la mente, áreas en las que muchas personas con TEA presentan dificultades.
  4. Inventarios de personalidad complejos o abiertos (como el MMPI-2): Al ser extenso y con preguntas abstractas o abiertas, podría no ser adecuado para personas con TEA, quienes podrían responder de forma muy literal y perder matices en las preguntas, afectando la validez.
  5. Evaluaciones de funciones ejecutivas altamente estructuradas sin apoyos visuales: Pruebas como la Torre de Hanoi o similares pueden resultar complicadas si la persona tiene dificultades con el pensamiento abstracto, la planificación o la secuenciación. Pueden requerir adaptaciones para ofrecer una medida justa de las habilidades ejecutivas.

Para una evaluación más precisa, es importante elegir herramientas ajustadas a las habilidades de la persona, utilizando pruebas de evaluación no verbal o adaptando el contexto y la estructura de las pruebas en función de las características de cada individuo.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *